Viajar en crucero se ha convertido en la
actualidad en una de las maneras más populares de vacacionar. Hay muchas
opciones, tanto de paquetes como de destinos disponibles, por lo que incluso
los viajeros más exigentes encontrarán lo que andan buscando en un crucero.
Los cruceros que más popularidad están
teniendo recientemente son los que nos llevan a Alaska. La razón es bastante
obvia. En un crucero a Alaska se combinan espectaculares paisajes, una abundante
vida silvestre y excursiones por tierra que combinan aventura y confort al
mismo tiempo.
A la hora de tomar un crucero a Alaska, puedes
hacerlo en lujosas y costosas suites o en cabinas interiores económicas. El
hecho es que puedes encontrar paquetes de cruceros a Alaska que se adaptan a
casi cualquier presupuesto, todo es cuestión de hacer una buena búsqueda en
internet o consultar con tu agencia de viajes favorita.
Debido a las condiciones climáticas en esta
parte del mundo, las opciones para viajar en crucero por Alaska son más
restringidas que si fueras a viajar al Caribe o Hawaii, donde hay un clima
perfecto prácticamente durante todo el año.
La mayoría de las líneas de cruceros
consideran que el momento ideal para tomar un crucero a Alaska es entre mayo y
septiembre. Por lo tanto, en esta temporada la mayoría de las compañías ofrecen
paquetes de cruceros que van desde viajes cortos de fines de semana hasta
travesías de 18 días o más.
Verano
en Alaska: la mejor época para ver las ballenas jorobadas
Si quieres viajar a Alaska con las mejores
condiciones climáticas, lo mejor es hacerlo durante el verano. Pero, incluso en
medio del verano, la temperatura es todavía bastante baja en Alaska, y deberás
estar preparado para unas frecuentes fluctuaciones climáticas.
Debes llevar unas cuantas prendas de
vestir, como suéteres, chaquetas, camisas manga larga, etc. pero es
imprescindible que no se te olvide llevar un abrigo grueso, un impermeable y unos
lentes de sol.
La ventaja del verano es que es la mejor
época del año para ver las ballenas jorobadas, así como otros mamíferos
terrestres.
La primavera
y el otoño: los dos mejores meses
Los dos mejores meses para visitar Alaska son
mayo y septiembre. La razón es que el mar suele estar más tranquilo durante
estos meses, por lo que la travesía será
más cómoda.
En la primavera, sobre todo en mayo, las
flores están abriéndose.
La abundante vida salvaje en torno a un mosaico de
flores silvestres te brinda un espectáculo que recordarás toda la vida, además
de que lograrás hermosas fotografías.
Como el otoño llega temprano en Alaska,
verás un abanico de colores en septiembre, cuando las hojas de los árboles
empiezan a cambiar de color.
Y con la llegada de la nieve, disfrutarás viendo
la vida salvaje en un majestuoso fondo de montañas cubiertas de nieve.
Y si corres
con suerte, en algunas zonas podrás ver la aurora boreal en la noche.
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