Cuando decimos “vacaciones", ¿Qué es lo
primero que te viene a la mente? Si eres es como la mayoría de nosotros, te
vendrá a la mente "olvidarse de todo".
Existe una nueva forma en la cual realmente
te puedes aislar de todo el estrés de tu día a día, en el trabajo y la vida
familiar. Tus próximas vacaciones pueden ser el más relajante aislamiento de
mente y espíritu que jamás hayas tenido. Al mismo tiempo, estas vacaciones te
pueden dejar el cuerpo exhausto y listo para el sueño más profundo y reparador.
¿Cómo puedes estar al punto de agotamiento
físico y profundamente relajado al mismo tiempo? ¿Dónde puedes encontrar ese
tipo de escape?
La respuesta está en el mar, a bordo de uno
de los cruceros de lujo que son cruceros
todo incluido (o en inglés “all inclusive”).
Estos cruzan los océanos por las costas
del Golfo de México, pasando por el Mediterráneo, hasta llegar a las islas de
Dubai. También los encuentras en las Bahamas o en las frías aguas de Alaska.
Lo que obtienes por tu dinero en un crucero todo incluido puede variar casi
tanto como sus destinos. Casi todos los cruceros incluyen la habitación con todas
las comidas, por un solo precio. Muchas agencias de viajes definirán un crucero
todo incluido como aquel que incluye el pasaje aéreo u otros gastos de viaje
hacia y desde el puerto, y la habitación básica con sus respectivas comidas.
Las bebidas alcohólicas, las actividades a
bordo y las actividades en el puerto pueden estar o no incluidas en el precio del crucero todo incluido. Sin embargo, lo que
te ahorras en un crucero todo incluido es considerable. El precio de una comida
en las Bahamas, por poner un ejemplo, puede terminar costando lo mismo que un
día entero en un crucero. Ese día incluiría todo lo que puedas comer en el
desayuno, tendrás un almuerzo tipo buffet, una cena de 5 estrellas, alojamiento
de lujo, piscina, spa completo, espectáculo estilo Broadway, casino y mucho
más.
¿Recuerdas
que te dije que en un crucero terminarías agotado?
¡Aquí es la parte donde viene el agotamiento! Te verás tentado a probar cada
una de las actividades que se realizan en el barco, querrás ir de excursión,
comer en cada restaurante a bordo y disfrutar de todo
para sacarle provecho a la inversión que hiciste.
Al tomar la decisión acerca de reservar o
no en un crucero, trata de pensar primero, qué es lo que quieres en tus
vacaciones. ¿Es el destino al que se dirige el barco lo que te motiva a hacer
un crucero? o ¿es el tiempo que dura la
travesía? ¿Quieres elegir entre muchas actividades, o estás buscando un crucero
que se centre en torno a una pasión tuya? Una vez que hayas tomado una decisión,
es sólo cuestión de evaluar todas las ventajas que ofrece un crucero todo
incluido (all inclusive) para que
hagas tu reservación.
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